domingo, 26 de junio de 2016

"El lenguaje como sistema de comunicación poderoso y eficaz"

El término comunicación es un vocablo muy común en diferentes ámbitos de la vida; como son los negocios, la educación, la política, la economía, la sociedad, etc., porque se requiere que éstos, se lleven a cabo con una comunicación asertiva para lograr una transmisión de información, conocimientos, experiencias, etc., con éxito. Sin embargo, muy pocas veces se reflexiona lo que implica este término y cómo se debe llevar a cabo para lograr su objetivo. “José Ortega y Gasset en sus Meditaciones del Quijote dice: “Yo soy yo y mi circunstancia”. Esta frase es la esencia del pensamiento que define la comunicación como el encuentro de un organismo con su entorno” (O’Sullivan, 1996). Tomando como base esta premisa la comunicación surge cuando el ser humano tiene un encuentro con su medio y nace la necesidad de intercambiar pensamientos, sentimientos, hechos, información, etc., con otros entes de la sociedad.

La comunicación se efectúa por medio de diferentes comportamientos, métodos o sistemas pero “el lenguaje ciertamente es el sistema de comunicación más poderoso y eficaz, el atributo más típicamente humano y universalmente reconocido como único del hombre” (Ricci, Pio, y Bruna, Zani, 1986, pp. 93). El lenguaje ha sido estudiado desde 4 dimensiones fundamentales que son: como sistema, como arte, como conocimiento y como comportamiento. Es en el lenguaje como sistema que entra la lingüística que es “el área central de los estudios del lenguaje, donde el lenguaje se define como  un sistema de sonidos y símbolos y tiene como propósito llegar a la elaboración de afirmaciones generales sobre la estructura de tales datos” (Ricci, et. al., 1986, pp. 96).

Esta definición contiene tres niveles de análisis, los cuales son: 1er nivel, los signos lingüísticos,  los sonidos, siendo la fonética el estudio de la descripción de los diversos sonidos puros que pueden presentarse en las diversas lenguas excluyendo toda influencia ambiental; el 2do nivel, son los principios que brindan la formación de frases, la sintaxis; el 3er nivel, la semántica, la manera en que cada elemento significa y en qué manera los significados de cada elemento se combinan para formar el significado de las unidades complejas.

Por otra parte, Beteson, et. al. (1982), menciona que la concepción de la comunicación entre dos individuos como transmisión de un mensaje sucesivamente codificado y después descodificado, reanima una tradición filosófica en la que el hombre se concibe como un espíritu enjaulado a un cuerpo, que emite pensamientos en forma de ristras palabras. Según esta tradición, la comunicación entre dos individuos es, pues, un acto verbal, consciente y voluntario. Paul Watzlawick y John Weaklan  definen a la comunicación como “un proceso social permanente que integra múltiples modos de comportamiento: la palabra, el gesto, la mirada, la mímica, el espacio interindividual” (Bateson, 1982, pp.23).


La comunicación es la base de toda interacción social, sin comunicación, diría  Luhmann (1993), no puede hablarse de sistema social. Y partiendo que la comunicación es un proceso para el desarrollo de la sociedad,  el lenguaje es un sistema de comunicación eficaz,  porque por medio de sonidos y símbolos elabora enunciaciones, que permiten dar a conocer, datos, conocimientos, experiencias, etc, a los demás sujetos sociales. 

Referencias 

Bateson; Birdwhistell; Goffman; Hall; Jackson; Scheflen; Sigman y Watzlawick. (1982). “El telégrafo y la orquesta” en La Nueva Comunicación. Barcelona: Kairós, pp. 11-25.
Luhmann, Niklas y De Georgi, Raffaele. (1993). Teoría de la sociedad. México: Universidad Iberoamericana.
O'Sullivan-Ryan, Jeremiah. (1996). La Comunicación Humana: grandes temas contemporáneos de la comunicación. Venezuela: Universidad Catolica Andres.
Ricci, Pio, E y Bruna, Zani. (1986). “Estudios del lenguaje” en La comunicación como proceso social. México: Grijalbo, pp. 93-103.
Ricci, Pio, E y Bruna, Zani. (1986). “Estudios del lenguaje” en La comunicación como proceso social. México: Grijalbo, pp. 114-133.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario